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jueves, 21 de febrero de 2013

Perseguidores del plagio

El título de doctor en Alemania está muy bien visto. Allí este título se utiliza en todas las especialidades académicas, sin que se refiera específicamente a los médicos tradicionales. A tal extremo llega que el título de doctor se encuentra en los letreros de buzones privados, esquelas o tarjetas de visitas. Para merecer este título, uno debe terminar los estudios universitarios, redactar una tesis de doctorado y exponerla delante de un tribunal.

Con la llegada de la revolución digital, se puso en marcha un grupo de personas que formaron un foro donde se dedican a rastrear tesis doctorales plagiadas. Este foro se llama VroniPlag y a causa de sus actuaciones al menos ocho científicos y políticos han tenido que dejar su cargo. VroniPlag es un banco de datos en el que cualquiera puede intervenir, al estilo de wikipedia. Los usuarios de este foro no cobran por lo que hacen, lo hacen por diversión y cuando encuentran un posible caso de plagio se coordinan de tal forma que acorralan al plagiador.

Un caso famoso fue el de Karl Theodor zu Guttenberg que era el Ministro de Defensa cuando salió a la luz el plagio de su tesis doctoral. Guttenberg negó las acusaciones, y llego al demandar a todos los que le acusaban de plagio, hasta que VroniPlag demostró que el 82% de su tesis era plagio. A pesar de la información que sacó VroniPlag, no fue hasta 2011 cuando la universidad de Bayreuth le despojo de su título que anuncio su dimisión.

Algo muy parecido le sucedió a Silvana Koch-Mehrin, política del partido FDP y diputada del parlamento europeo. Pero en vez de defender su inocencia con tanta determinación como Guttenberg, ella dimitió nada más salir los primeros rumores sobre su posible plagio de forma que perdió interés mediático. La última ministra alemana en ser acusada de plagio ha sido Annette Schavan, la Ministra de Educación. Después de haber salido a la luz rumores de plagio en su tesis doctoral, ella admitió que no había nombrado a los verdaderos autores en las correspondientes notas a pie de página pero que las conclusiones de la tesis eran completamente suyas. Pero en enero de este año la Universidad de Düsseldorf creó una comisión de control que no tardo en declararla culpable de plagio y fue despojada de su título.

Los repositorios institucionales son actualmente una de las fuentes de información de referencia para localizar y consultar las tesis doctorales leídas en las universidades y, en la medida en que la documentación que albergan puede consultarse en acceso abierto, se convierten en el mejor antídoto para evitar el plagio.

Más información sobre el repositorio institucional de la UAM Biblos-e Archivo.



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