Don Luis Díez-Picazo Ponce y León es catedrático emérito de la Universidad Autónoma de Madrid. A lo largo de su extensa carrera, ha compaginado diferentes actividades, en las que ha dejado una huella indeleble. En la Academia, fue ayudante y “discípulo predilecto” de su maestro, el Prof. Federico de Castro (1953-1963), de quien heredó, para dar continuidad, el seminario jurídico de los miércoles en la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación. Fue profesor y estudioso siempre en diferentes universidades, y su saber ha contribuido a impulsar el Derecho Civil.
Su conocimiento jurídico ha sido transmitido no sólo por las “clases presenciales”, sino que algunos de sus libros fundamentales han venido a constituir instrumentos básicos de la formación de juristas, de los que son ejemplo sus
Fundamentos del Derecho Civil patrimonial y
Sistema de Derecho Civil, además de diversas monografías y artículos sobre el Derecho Civil, pero no sólo de ello. Una enseñanza de gran calidad también le distingue y, en este aspecto, se muestra como un verdadero maestro que intenta transmitir un conocimiento buscando la claridad del mensaje, la ordenación racional del texto y la dicción elegante.
El Prof. Díez-Picazo ha sido siempre un jurista atento a la realidad social. Es, en definitiva, un jurista práctico en el mejor de los sentidos: una persona culta, madura y prudente que, además de explicar la relación fáctica con la que se encuentra, intenta aplicar las pautas que le permiten resolver el conflicto, actual o potencial, y ordenar la vida social. Fue abogado y miembro del Poder Judicial. En éste, ganó por oposición la plaza de Juez de Primera Instancia e Instrucción (1956), que ejerció por breve tiempo. Posteriormente, desempeñó como magistrado en el Tribunal Constitucional (1980-1989).
En la actualidad, es Presidente de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, y de la Sección 1ª de Derecho Civil de la Comisión General de Codificación del Ministerio de Justicia, y es Consejero del Estado. Su labor ha sido reconocida por el doctorado honoris causa que le han concedido las Universidades Carlos III de Madrid, de Valencia, de Málaga, de Valparaíso (Chile), de Buenos Aires y de Tucumán (Argentina).