George Washington, multado en la biblioteca

El primer presidente de Estados Unidos ha sido “cazado” por los trabajadores de la New York Society Library, por no devolver dos volúmenes que tomó prestados en 1789. La multa que acumula el ex-presidente asciende ya a los 300.000 dólares.

Fue a principios del siglo pasado cuando se encontró, dentro de un contenedor de basura, el primer libro en el que se recogían las sanciones a los usuarios morosos. Pero cuál fue la sorpresa al comprobar que uno de ellos era el mismísimo George Washington, quien tomó prestado “Law of Nations” y el volumen 12 de “English House of Commons” para no devolverlos nunca. En los registros de la biblioteca no aparece la fecha de devolución y los libros no se encuentran en la colección.

Según el blog de esta biblioteca neoyorquina, la historia se está haciendo muy popular entre los usuarios y trabajadores. Sobre todo después de que el director de New York Daily News se hiciera eco de ello, y decidiera dedicarle un extenso reportaje en el noticiario nocturno del sábado 17 de abril.

Según estos registros, Washington se llevó los libros el 5 de octubre de 1789, unos cinco meses después de que ocupara la presidencia, cuando Nueva York era todavía la capital. En el nombre del usuario aparece tan sólo la palabra “Presidente” escrita con pluma. Sin embargo no hay nada escrito en la fecha de devolución, el 5 de noviembre del mismo año.

Pero Washington no es el único usuario ilustre que aparece entre los deudores de libros de esta biblioteca. El primer secretario del Tesoro, Alexander Hamilton; el primer presidente del Tribunal Supremo, John Jay; y el vicepresidente de Thomas Jefferson, Aaron Burr también figuran en la lista, aunque ellos finalmente devolvieron los libros.

En declaraciones al periódico The Guardian, Mark Bartlett, director de la New York Society Library, afirmó que la elaboración del reportaje no se hizo en un tono recriminatorio. “No pretendemos cobrar la multa” aseguró, “pero sí estaríamos muy felices si pudiéramos conseguir los libros de vuelta”.


Si no quieres que esto mismo te ocurra consulta la normativa para préstamo domiciliario de la Biblioteca y Archivo de la UAM.


(Foto tomada de Wikipedia)