Iván Illich (1926-2002)
Este autor, fue un polifacético e itinerante pensador. Nació en Austria, país del que se vio forzado a huir por su ascendencia judía ante el auge del nazismo. Recaló en primer lugar en Italia, y posteriormente continuó su periplo en varios países hispanoamericanos (México y Puerto Rico), en Estados Unidos y en Europa. Esta itinerancia vital encuentra su paralelo en su misma formación, que incluía estudios en ciencia pura (histología y cristalografía), filosofía y teología (ejerció el sacerdocio) y en el conjunto de su obra, que abarca la economía, la sociología, la pedagogía, la crítica literaria o la teología.Obras reunidas de Ivan Illich Vol. II
El libro que presentamos es un buen ejemplo de esta riqueza de intereses, y reúne cuatro obras de su etapa de madurez. Illich se puede encuadrar en las corrientes de pensamiento crítico respecto a la sociedad industrial y capitalista contemporánea, y su obra está muy vinculada a la época de los movimientos de protesta que proliferaron en 1968, incluida la Teología de la Liberación de tanta presencia en Hispanoamérica.El trabajo fantasma (1981)
Señala el problema de la presencia masiva del trabajo no renumerado e "invisible" en las sociedades actuales; en palabras de un estudioso de Illich "el trabajo asalariado, cada vez más escaso, y el trabajo fantasma, cada vez más demandado, se complementan (...) para agudizar cada vez más el malestar que las sociedades industriales producen".El género vernáculo (1982)
Presenta el paso de lo vernáculo (concepto figurado que define como las actividades que se realizan no movidas por factores de interés e intercambio) a lo moderno; y en concreto manifiesta sus recelos ante una igualdad de género que pueda derivar en una interesada indiferenciación que derive en un factor de explotación más, dentro la característica ilusión ideológica moderna de la igualdad y la movilidad social, que escondería y fomentaría relaciones de competitividad, envidia y frustración.H2O y las aguas del olvido (1985)
Nos acerca a la parte de su obra de preocupaciones ecologistas, relacionable con las posteriores teorías del decrecimiento, y que cuestionan las bases del modelo de desarrollo dominante desde distintos puntos de vista. Su raíz está en el convencimiento de la necesidad de dirigirse hacia unas sociedades mucho más austeras, pero también. más libres.En el espejo del pasado (1992)
Recoge una selección de conferencias, desde 1978 en adelante, en las que se tratan temas como la salud, la vivienda, la educación, la alfabetización, la tecnología, la paz y los valores éticos. Siendo su preocupación general la libertad individual realizada en la "interdependencia" personal.En suma, una oportunidad para recuperar a un pensador que ha quedado demasiado perdido, como si perteneciera a un pasado contestatario contextual, cuando el fondo sobre el que gira su obra habla de una época en absoluto cerrada.
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